Veo unas secuencias de humoristas actuales y lamento el cambio del concepto de humor que se ha producido. Antes, entendíamos por tal algo elegante, cuyo motivo de risa consistía en las ingenuidades de quien hablaba, en los juegos de palabras, los sobreentendidos y similares. Algo que se podía ver en familia.
Hoy todo eso ha pasado. Encuentro el humor actual como algo vulgar, soez y a veces (muchas) grosero. Las situaciones escabrosas están a la orden del día entre los humoristas, así como las palabras malsonantes. Mejor no verlo con niños delante, claro. Ya es algo ·para adultos y qué adultos, pienso yo.
Recuerdo Lra Codorniz, “la revista más audaz para el lector más inteligente” donde escribían los grandes (Gila, Mingote…) y donde los juegos de palabras estaban a la orden del día (bombín es a bombón…) así como las frases de doble sentido (reina en toda España un fresco general procedente del noroeste…) Había secciones inolvidables, como La comisaría de papel o La cárcel de papel, así como los chistes de marquesas o los de Kalikatres. En fin…
Una revista de muy corta vida fue Don José. Era un suplemento de humor de un diario, cuyo nombre no recuerdo. En ella, además de los chistes de turno, nunca malos, había una sección no periódica en la que su autor parodiaba poesías que todos conocíamos. Sin salirse del aire de la obra, la escribía en tono actual, dejando un profundo sabor humorístico en el lector. Recuerdo una parodia de la Coplas por la muerte de su padre, que no aprendí y ahora no encuentro,
También unas serranillas al gusto del Marqués de Santillana. Estas sí me las aprendí de memoria y las traigo ahora aquí, como muestra de aquel humor que añoro, y creo no ser el único en tal añoranza.
SERRANILLAS
En Navacerrada
Serrana yo vide
Gorda e colorada.
Montada en borrico
Vestía un refajo
Que exhalaba un rico
Regustillo de ajo.
Camisa e faldeta
Teñida de azul,
Con su camiseta
Y su canesú.
Y yo colegía
viendo tal primor
que no la vestía
don Cristian Dior.
Al verla tan linda con su perifollo
Se abolló mi estrella
Cual mustio repollo.
Vila que partía
Y por saber do iría
Igual que un pelele
Fuile y preguntele.
- Do marchas, quizás?
Do vas, girasol?
Do vienes, do vas?
Do… re, mi, fa, sol?
No me contestome
Mas la su mirada,
Desencuadernome.
- Hoy es Nochebuene,
Dixen, Serranilla,
E tengo una cena
Con pavo e morcilla.
Darete el asado
Que te he susodicho
Y un cerdo cebado
Con perdón sea dicho.
De leche unas copas
Que dan calorías
Y al final tres copas
De González Bias.
Lavarás tus dientes
Con mano tranquila,
Con buches calientes
Y con clorofila.
Creo en paridad
Que te ofrezco, moza,
Buena Navidad.
- Otros la disfruten,
Dixo. caballero
La cena es de buten
Mas cenar no puedo.
No por etiqueta
Rechazo el cenar,
Es que estoy a dieta
Para no engordar.
Cien gramos de queso
Y vino del porrón,
Me manda el travieso
Doctor Marañón.
- ¿No vendrás, chiquilla?
- Señor, no iré.
- Adios, Serranilla.
- Adios, Don José.
En Navacerrada,
Serrana yo vide
Que no comía nada.
No sé si esto sigue siendo considerado humor, no lo sé. Pero a mí me lo sigue pareciendo, me gusta y añoro cosas de este tipo.